ás Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hágase Señor tu voluntad así en la Tierra como en el cielo, danos hoy el pan nuestro de cada día, perdona nuestras ofensas así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en tentación y línos de todo mal. Amén” Envía esta cadena a cinco personas. En un rato más, cinco personas habrán orado por ti, y tu habrás logrado que muchas personas recen a Dios por otras personas. Reflexiona con estas palas de Jesucristo “Si te avergüenzas de mí, yo me avergonzaré de ti ante mi Padre”. Envía esta cadena de oración a todos tus contactos. Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hága
ás Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hágase Señor tu voluntad así en la Tierra como en el cielo, danos hoy el pan nuestro de cada día, perdona nuestras ofensas así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en tentación y línos de todo mal. Amén” Envía esta cadena a cinco personas. En un rato más, cinco personas habrán orado por ti, y tu habrás logrado que muchas personas recen a Dios por otras personas. Reflexiona con estas palas de Jesucristo “Si te avergüenzas de mí, yo me avergonzaré de ti ante mi Padre”. Envía esta cadena de oración a todos tus contactos. Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hága
ás Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hágase Señor tu voluntad así en la Tierra como en el cielo, danos hoy el pan nuestro de cada día, perdona nuestras ofensas así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en tentación y línos de todo mal. Amén” Envía esta cadena a cinco personas. En un rato más, cinco personas habrán orado por ti, y tu habrás logrado que muchas personas recen a Dios por otras personas. Reflexiona con estas palas de Jesucristo “Si te avergüenzas de mí, yo me avergonzaré de ti ante mi Padre”. Envía esta cadena de oración a todos tus contactos. Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hága
ás Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hágase Señor tu voluntad así en la Tierra como en el cielo, danos hoy el pan nuestro de cada día, perdona nuestras ofensas así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en tentación y línos de todo mal. Amén” Envía esta cadena a cinco personas. En un rato más, cinco personas habrán orado por ti, y tu habrás logrado que muchas personas recen a Dios por otras personas. Reflexiona con estas palas de Jesucristo “Si te avergüenzas de mí, yo me avergonzaré de ti ante mi Padre”. Envía esta cadena de oración a todos tus contactos. Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hága
ás Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hágase Señor tu voluntad así en la Tierra como en el cielo, danos hoy el pan nuestro de cada día, perdona nuestras ofensas así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en tentación y línos de todo mal. Amén” Envía esta cadena a cinco personas. En un rato más, cinco personas habrán orado por ti, y tu habrás logrado que muchas personas recen a Dios por otras personas. Reflexiona con estas palas de Jesucristo “Si te avergüenzas de mí, yo me avergonzaré de ti ante mi Padre”. Envía esta cadena de oración a todos tus contactos. Es hora de orar al creador. Lo único que tienes que hacer es: Rezar un padre nuestro por la persona que te envió este mensaje: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre venga a nosotros tu reino, hága